Gracias, padre.
Imaginaros la madre y la bebé en un abrazo, tumbadas en el sofá y la niña de 4 años correteando y cantando por allí…
Las tres bien atendidas. Intimidad. En este marco, con amor, paciencia y buenos cuidados en la CUARENTENA encaminamos la lactancia y las nuevas relaciones que acaban de nacer.